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Todo el mundo, incluidos los escritores profesionales, cometemos errores al escribir. Incluso cuando aprendes lo básico, buscar matices gramaticales y estilísticos de nivel superior puede resultar abrumador. Gramaticalmente, que se llama a sí mismo asistente de escritura , puede ayudar en estos escenarios. Esta aplicación para escritores sugiere cambios de ortografía, gramática y estilo en tiempo real e incluso puede editar para géneros específicos. Aunque sus suscripciones son un poco caras y el servicio no funciona sin conexión, el soporte de Grammarly para muchas plataformas y su facilidad de uso compensan el costo.
Grammarly cuesta $12,00 por mes, $ 59,95 por trimestre o $ 139,95 por año. Si el precio parece alto, sepa que Grammarly suele ofrecer descuentos por suscripción. Por el precio de la entrada, obtienes controles personalizados para diferentes tipos de documentos, un filtro de plagio y una función para ayudarte a diversificar tu vocabulario, entre otros extras. Grammarly también ofrece una versión gratuita limitada que verifica errores ortográficos y gramaticales críticos. El nivel Business de Grammarly cuesta $$15 por miembro por mes y se factura anualmente.
Grammarly ofrece clientes de escritorio nativos para Windows y macOS; extensiones de navegador para Chrome, Firefox, Safari y Edge; y un complemento de Microsoft Office (ahora en plataformas Mac y Windows). Grammarly también se puede utilizar en Android e iOS a través de una aplicación de teclado móvil.
Además, Grammarly es compatible con otras dos plataformas de escritura importantes: Google Docs y Medium. La integración de Google Docs ha adquirido recientemente nuevas funciones, que analizaré en una sección posterior. Sin embargo, aún necesita usar la extensión de Chrome para obtener la experiencia completa de Grammarly Google Docs.
Grammarly compara su escritura con su base de datos de errores de contenido y estilo, así como con datos recopilados de forma anónima de sus usuarios activos diarios. La desventaja de este modelo en tiempo real es que Grammarly requiere una conexión a Internet para funcionar. En uso, Grammarly resalta los errores críticos en rojo (ortografía y gramática básica) y los errores avanzados en otros colores (estilo y mejores prácticas), aunque esta última característica está limitada a usuarios premium. Al pasar el cursor sobre cualquiera de las palabras o frases indicadas se muestra la opción de corregir el error directamente o leer una explicación más detallada del error.
Comencé a usar mucho Grammarly durante las pruebas. Se podría argumentar que Grammarly fomenta la escritura perezosa, y eso es al menos parcialmente correcto, ya que algunas personas aprovecharán sus comprobaciones exhaustivas sin molestarse en aprender de la información que proporciona. Es adecuado para personas que buscan activamente mejorar su escritura, pero aún así está dirigido a usuarios que no son conscientes de que necesitan ayuda. El valor real de Grammarly es su capacidad para resaltar los errores más comunes y ayudarle a evitarlos en el futuro. Ocasionalmente encontré que las ediciones en tiempo real me distraían durante mis pruebas y deshabilité la gramática para poder terminar de escribir un pensamiento sin que me interrumpieran. Grammarly puede ser más útil durante la parte de revisión de su proceso de escritura como verificación final de errores e inconsistencias.
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Me costó encontrar muchas diferencias entre la versión gratuita de Grammarly y el corrector ortográfico, gramatical y de estilo integrado en la última versión de Microsoft Office. Ambos identificaron correctamente errores ortográficos, oraciones complicadas y uso incorrecto de la gramática. Las comprobaciones de edición avanzadas de Grammarly, que ayudan a limpiar todos los detalles gramaticales mediocres, sugieren alternativas para palabras de uso común y proporcionan ediciones contextuales para mayor claridad, son muy útiles. Por ejemplo, Grammarly propone deshacerse de las comas innecesarias. Otro beneficio claro de Grammarly es que funciona en más lugares de su flujo de trabajo.